Por:
Lizeth López.

"AUNQUE TODOS PENSAMOS QUE EL DRAMA DE LOS SECUESTRADOS TERMINA CON SU LIBERACION, EL REGRESO A CASA TAMBIEN PONE A PRUEBA  A ESTAS PERSONAS." 

Durante su cautiverio muchos de estos sueñan con comer cosas como langosta, hamburguesas o simplemente tomarse un vaso de coca cola y cuando son liberados o rescatados, su apetito se cierra igual que su estómago, y la explicación a esto era que su intestino necesita una nueva adaptación pues se acostumbran a ciertos alimentos y a ciertas cantidades  limitadas durante el secuestro y ahora se requiere de un tiempo para tolerar nuevas comidas.

Estos son apenas pequeños detalles, que además implican otros como el comer con cubiertos, bañarse con agua caliente o dormir en una cama cómoda , hasta en asuntos más complicados como retomar las relaciones con su familia ,amigos o pareja, para recuperar el tiempo perdido, también para volver a la vida laboral e incluso para continuar con su proyecto de vida.

las consecuencias no son iguales depende de la edad la condición social, la condición civil del plagiado, el lugar donde estuvo cautivo e incluso el tipo de secuestro, es decir, por política, por dinero... Y por consiguiente lo vivido se adapta e influye en la manera de cómo se va a recuperar la persona en su libertad.

Otros de los problemas es la nueva adaptación a una rutina puesto que no saben utilizar el celular, no logran recordar las cosas de su casa, no saben que es el transmilenio, no saben enviar un correo electrónico, no saben que algunas calles han cambiado de sentido y sienten necesidad de ayuda para desplazarse por la ciudad, pierden el sentido de la ubicación porque en el monte todo es “pa delante mijo” y en la ciudad? carros y semáforos…

Al igual, en la vida laboral también hay consecuencias  y graves,  un ejemplo de esto se aplica a los abogados puesto que en diez o doce años han cambiado los códigos, se han reformado leyes y ni se diga los sistemas de justicia y para un importante empresario las formas de hacer negocios cambian y ni se diga de la tecnología.

Pero por otro lado se encuentran valores y cosas positivas, actitudes de paciencia, sin deseos de venganza y con un ideal que nadie sufra lo que ellos vivieron, pero a esto se opone al sufrimiento que ha sentido la familia, te imaginas ser secuestrado y dejar a tu hijo pequeño, que pasen  años y después de ser liberado o rescatado escuchar esa voz adolecente que dice, mamá o papá.